domingo, 18 de diciembre de 2011

EL HOMBRE QUE POSIBILITÓ EL HALLAZGO DE LA FOSA COMÚN EN EL ARSENAL


Omar Eduardo Torres, era gendarme cuando presenció los fusilamientos ejecutados por Bussi y las incineraciones de los cuerpos en la unidad militar. Cuando contó su relato a la justicia, muchos dijeron que estaba loco, hoy 36 años después las pruebas le dan la razón.
Por CARLOS QUIROGA
Fotos: JULIO CARRIZO

Detrás del hallazgo de una fosa común de inhumación en el arsenal Miguel de Azcuénaga, donde fueron encontrados restos óseos correspondientes a un mínimo de 15 individuos esqueletizados parcialmente quemados durante la última dictadura militar, se encuentra la valiente historia de Omar Eduardo Torres (61), el ex gendarme, que presenció varios de esos fusilamientos y fue una pieza fundamental para que el equipo de antropología forense realizará con éxito las excavaciones. Hoy cuando los hechos corroboraron sus dichos, Torres se siente satisfecho, no sólo porque la verdad salió a luz, sino también porque pudo demostrar ante la sociedad que el horror que había presenciado no era producto de sus fantasías, sino nada más que la verdad y lejos de buscar fama acepta esta sólo como una muestra de reivindicación: “Yo me enteré que los datos que había aportado eran correctos en abril cuando se encontró la primera fosa, pero antes tuve que soportar que muchos cuestionaran mi testimonio, entre ellos el ex juez federal, Mario Racedo, que mientras estuvo a cargo mandaba a excavar en los lugares que yo no le había dicho, para dejarme mal. La situación se revirtió cuando se hizo cargo el doctor Daniel Bejas “.
-Hoy 36 años después ¿qué recuerda de aquella época?
-El olor a carne quemada que contaminaba el aire fresco después de los fusilamientos, era irrespirable, durante mucho tiempo lo tuve impregnado en mis fosas nasales. Recuerdo que yo no podía comer de la hedentina que había.
-¿En qué circunstancias se producían esos fusilamientos?
-Cada 15 o 20 días se hacía presente en el arsenal. Antonio Domingo Bussi. A veces venía acompañado por el entonces jefe de la policía, Zimerman y varios oficiales más. Llegaban alrededor de la medianoche en una caravana de autos. Bussi siempre vestía de combate. Se hacía un pozo de 4 a 5 metros de ancho y 2 de profundidad. Los detenidos se arrodillaban con los ojos vendados o encapuchados a la orilla del pozo y allí Bussi, junto a los otros oficiales le daban un tiro en la nuca.
-¿Durante esas ejecuciones, había presos que se revelaban con el último aliento?
-No, porque cuando llegaban al pozo estaban bastantes machucados para decir nada. Se les pegaba por cualquier cosa, no tenían derecho a revelarse por nada. Si se quejaban por la comida los castigan o se los privaba de las siguientes comidas y siempre estaban amenazados de que los iban a fusilar.

EL OLOR A CARNE QUEMADA ERA INSOPORTABLE


-¿Y cuando quemaban los cuerpos?
-Después de las ejecuciones. El pozo por lo general había sido rociado con anterioridad con nafta o querosén y siempre había leña a mano para quemar los cuerpos. Al día siguiente de las ejecuciones, cuando pasábamos por el pozo veíamos algunos huesos y el olor a carne quemada, era insoportable.
-¿Y usted durante esas ejecuciones pudo reconocer algún detenido?
-Sí a Ana Corral y a Luis Falú.
-¿Esas ejecuciones quedaban registradas en algún lado?
-Sí, había un libro de guardia donde figuraba el nombre de los detenidos, el documento y la fecha de ingreso. Después de las ejecuciones le ponían viajó o lo tildaban con una cruz.
-¿Y usted cómo vivía toda esa situación?
-Con mucha indignación. Constantemente me reprochaba haber elegido ir allí. Yo estaba en campo e Mayo y pedí que mandaran a Tucumán porque estaba muy intrigado por lo que sucedía con la guerrilla, pero nunca me imaginé el horror que iba a vivir allí.
-¿Y usted por qué se animó a romper el silencio?
-A pesar de las advertencias que no digamos nada de lo que sucedía allí, yo no podía admitir esas atrocidades. Hubo varias noches que no podía dormir, porque las pesadillas de los fusilamientos me eran recurrentes, así que en 1994 me presenté ante la CONADEP para contar la verdad, que hoy después de las pruebas que se encontraron, ya nadie puede discutir.

LAS MENTIRAS DE BUSSI


Lejos de aceptar las responsabilidades que le correspondían, Antonio Domingo Bussi negó sistemáticamente las atrocidades de que se lo acusaban y prefirió llevarse el secreto a la tumba, sin contar que algún día las pruebas saldrían a la luz. En el 2000 cuando, lo entrevisté para la revista GENTE y lo consulté a acerca de las acusaciones de Omar Torres, con total desparpajo respondió: “Como cree usted que el gobernador de la provincia y comandante de una operación iba a ir al arsenal a fusilar prisioneros indefensos. Estoy convencido, con la seguridad más absoluta, que ni yo, ni nadie lo hizo, porque en la guerra no hay necesidad de ese tipo de acciones. En la guerra se combate, se enfrenta a un enemigo y la opción es dramática, dispara o usted muere”.

EL SOBREVIVIENTE


El doctor Roberto Aujier, fue uno de los pocos sobrevivientes del arsenal Miguel de Azcuénaga y cuando todavía una gran parte de la sociedad tucumana se negaba a creer las atrocidades cometidas por un Antonio Domingo Bussi, que gracias al voto popular había llegado a gobernador, aceptó a regañadientes contarme sobre el horror que había vivido allí.
“Recuerdo que minutos antes de la medianoche un grupo de gendarmes iba llamando a los prisioneros, que de seguro serían fusilados, porque jamás volvían”. Yo jamás vi a Bussi, porque vivíamos con los ojos vendados, pero se decía que él era el que ejecutaba y yo tengo firmes razones para pensar que era así, porque cuando se decía que él venía, se producía un gran revuelo en el arsenal. Y al otro día el olor a carne quemada se volvía insoportable. Nos era imposible comer”.
“A mí me secuestran en la puerta del colegio Nacional de Aguilares, dos muchachos jóvenes en una camioneta y me llevan al arsenal. La vida allí era muy dura, muchos preferían morir a vivir en ese infierno. Nos despertaban a la 6 de la mañana al divino botón nomás. A eso de las 9 nos daban un vaso de leche y de ahí nos sacaban a cortar pasto con la mano, hasta las 14 que nos daban de comer. Siempre era polenta vieja y la sobra de los soldados. Después seguíamos trabajando hasta que llegaba la hora de los interrogatorios, que se hacían en unas casillas que estaban en las esquinas del galpón. Va más que interrogatorio nos torturaban. Algunas veces con picana sobre el cuerpo desnudo, otras nos enterraban y los azotes eran cosas de todos los días y aquí puede ver las marcas”, dice Aujier mientras se saca la camisa y señala su espalda. La jornada terminaba a eso de las 20, a veces nos daban cena, otras no”.
“Todos sabíamos que nos iban a matar- afirma el doctor Aujier-. Ir al arsenal significaba estar condenado a muerte. Yo me salve de correr esa suerte, porque mi señora le escribió una carta al teniente general Benjamín Menéndez, que sabía que era un hombre de bien e intercedió ante Bussi para que recuperara mi libertad. De no haber si así, no le estaría contando lo que me tocó vivir”.

lunes, 28 de noviembre de 2011

LAS CONFESIONES DE BUSSI


Hoy a pocos días de su muerte, publico un reportaje inédito, donde por primera vez, el exonerado militar se atrevió a hablar de los desaparecidos, de las torturas y de los verdaderos motivos que lo llevaron a ocultar su millonaria cuenta en suiza.
Por CARLOS QUIROGA
Ilustración: CÉSAR CARRIZO
El ocaso político le había llegado de golpe. Los votos que lo habían consagrado diputado nacional en 1999, ya no le servían para sostener ese mascaron de ser la fuerza moral de los tucumanos. La omisión de su cuenta millonaria en Suiza, lo mostraba igual de corrupto que cualquier otro político. Poco y nada quedaba de ese general patriota, que él se creía, su figura se comenzaba a desdibujar, pero él no mostraba ningún viso de arrepentimiento por los crímenes de lesa humanidad por los cuales se lo acusaba. Más bien estaba orgulloso de su logro militar: haber aniquilado a la subversión. En ese contexto me recibió para concederme el último reportaje y por primera vez en años aceptó contestar sobre aquellos temas de los cuales prefería no hablar.

LA CUENTA SUIZA


-¿Qué siente como político, ahora que la cámara de diputados le negó el ingreso por sus violaciones a los derechos humanos?
- Esa decisión fue arbitraria y caprichosamente se utiliza el caso Luque para denegar mi ingreso, pero Luque era un miembro de la cámara, que supuestamente cometió actos posteriores a su incorporación. En mi caso se está hablando de supuestos actos anteriores a la elección, con la particularidad de esos actos supuestos, se cometen en el mismo lugar en donde yo vengo siendo ungido para los más altos cargos en elecciones nacionales y provinciales, por el pueblo que me vio en vivo y en directo actuar por más de 35 años tanto en mi vida privada, como vida pública. Así que se pueden equivocar hasta los jueces, pero el juez supremo y soberano, que es el pueblo, no se puede equivocar y ese es precisamente el que me vota.

- Sin embargo general, el argumento de peso que más valoró la cámara a la hora de evaluar su ingreso al congreso, es que siendo precisamente diputado nacional usted le mintió a ese cuerpo, cuando presentó su declaración jurada y omitió informarle sobre su cuenta en Suiza. ¿Cómo se explica que un nacionalista como usted lleve el dinero fuera de su país?
- Más allá de los sentimientos, que conforme a lo que usted dice más que nacionalistas son argentinistas, uno deposita en donde más le conviene desde el punto de vista del reedito de sus intereses. Y cuando lo hice en el año 84, había un gobierno que amenazaba con meternos presos a todos y embargar nuestros bienes. Entonces lo único que hice fue buscar el mejor resguardo para lo que fuera el producto de toda una vida de ahorros.

LA TORTURA, UNA EXCEPCION A LA REGLA


- A lo largo de estos años surgieron numerosos testimonios que hacen referencia a que aquí en Tucumán durante su comandancia, la tortura era aplicada con frecuencia para sacar información a los detenidos. ¿Era así?
- Aquí en Tucumán, yo establezco una diferencia, sin incursionar en el resto del país, era un teatro de guerra. Aquí se combatía contra un enemigo ideológico, mimetizado, que operaba por sorpresa, así que Tucumán era una excepción con respecto al resto del país.
-Disculpe a qué se refiere cuando hace referencia a que Tucumán era una excepción a la regla?
- El cambio está en las metodologías y las técnicas usadas por el agresor. Nosotros no podíamos de la noche a la mañana cambiar la instrucción del ejército y sus técnicas de combate. El cambio se produjo por la metodología que ensayaba la subversión. Esto de mimetizarse, esto de utilizar documentación falsa, alterar los rasgos fisonómicos de sus combatientes para evitar la identificación, atacar sorpresivamente y esconderse en el monte no son prácticas que del ejército argentino haya contemplado a la hora de librar una guerra. Los cambios a las reglas de juego, lo dispuso el enemigo agresor.
- Eso significaba torturar, secuestrar...
Estamos hablando mucho del pasado y yo sobre el pasado no quiero hablar.
- Justamente su pasado es hoy el que no le permite ingresar a la cámara de diputados-
- A mí se me ataca porque soy un adversario político, potencialmente difícil de derrotar en las urnas.

LOS DESPARECIDOS


- Bajo su comandancia se denunciaron numerosas desapariciones. ¿Cómo se explica eso, si usted como dice era un hombre apegado a las reglas?
- En Tucumán empleamos aviación, artillería y morteros 120. Usted bombardea una zona del monte, en donde supone que hay guerrilleros, y los restos de estos desaparecen y esos son los desaparecidos que hoy me reclaman.
- En Chile por ejemplo Pinochet entregó los cuerpos de los cuerpos de los muertos en combate, en cambio acá, hasta el día de hoy los familiares se quejan de no tener una tumba a donde llevarle una flor.
- Tucumán es un caso diferente. Y con esto no quiero formular ningún tipo de apreciación. Estos guerrilleros, vivían con los documentos alterados, se borraban las huellas dactiloscópicas, había algunos que se cambiaban las facciones y aquellos que nosotros podíamos recoger los exhibíamos en la morgue, publicando en el parte del combate del día, para los deudos, que vinieran a reconocerlo. Muchos no iban por vergüenza social. Quien va a ir a recoger un muerto en el campo de combate. Entonces lo sepultábamos, sin saber a ciencia cierta si era Julio Pérez, que figuraba en las papeletas que llevaba encima o era otro nombre. Y esos pasaron a ser los desaparecidos que hoy reclaman.
- ¿En el caso de los desaparecidos que según usted no han podido identificar en ese momento, hay documentación que podamos darle a la gente que hoy reclama por ellos?-
- A medida que fue pasando el tiempo, todo eso se fue depurando y decantando.
- ¿A usted seguro que no le quedó nada?-
- No, yo no reserve nada.
- ¿Sin embargo, yo recuerdo que el hermano de Alsogaray dijo que usted tenía una carpeta con fotos en las cuales sus padres identificaron el cuerpo?-
- Miente descaradamente, aprovechando la muerte del padre y la muerte de la madre. Porque el hecho de Alsogaray fue un hecho patente y elocuente de este tipo de lucha. Yo le mostré al general Alsogaray las planillas que se hacían de muerto por muerto y el padre no lo reconoció al hijo. La intuición de la madre sirvió para reconocerlo, porque figuraba con otro apellido.

“MERCEDES SOSA ES MI PREFRIDA”


Después de escuchar tan brutales confesiones, decidí llevar el reportaje a un terreno frívolo para relajarlo y después volver avanzar sobre los crímenes de lesa humanidad que se lo acusaban.
- ¿Iría a un recital de Mercedes Sosa?-
- Por Supuesto que sí, de los folkloristas argentinos por la melodía de su voz es una de mis preferidas.
- Pero ella, no quiso venir a Tucumán, cuando usted fue gobierno-
- Creo que lo hizo por una cuestión de propaganda
- N de autor (Por esos días Julieta Ortega, la hija de Palito posaba desnuda en la tapade una revista) - ¿Usted hubiera dejado que una hija suya posara desnuda para una tapa de revista?-
- No, yo tengo principios éticos y morales que afortunadamente he logrado hacer prender en mi familia.
Justo cuando pretendía volver a hablar sobre los años de plomo que lo tuvieron como protagonista, ingresó su secretario y le avisó que ya habían llegado los principales referentes del partido para la reunión que los había convocado. Bussi me despidió con un fuerte apretón de manos y la promesa de concederme otra entrevista que finalmente nunca se concretó. Pero en esa mañana de abril del 2.000 había conseguido que el militar orgulloso de sus logros, reconociera parte de la brutalidad con la que condujo el operativo Independencia.

lunes, 17 de octubre de 2011

25 AÑOS DE PERIODISTA


Este año celebro mis bodas de plata con el periodismo. El mejor oficio del mundo, porque me permitió ser testigo privilegiado de los acontecimientos más destacados del último cuarto de siglo: Desde el caso María Soledad hasta el crimen de Nora Dalmasso; e investigar los fenómenos caudillescos de Ramón Saadi, Carlos Juárez, y entrevistar a personalidades tan disimiles como, Susana Giménez y Barbarita Flores, la niña que le ganó la batalla del hambre en Tucumán. Y recorrer lugares impensados como la tierra de los gemios en Brasil, dónde las andanzas del científico nazi, Josef Menagale, se adelantaron varios años a la clonación, dando origen a la película “Los Niños del Brasil”.
Ninguna de estas vivencias periodísticas hubiesen sido posible sin la paciencia de mis ex compañeros del diario La Tarde, que siendo yo apenas un adolescente, me abrieron las puertas de la redacción. Vaya mi gratitud para todos ellos, pero muy especialmente para don Eduardo Arnau , primer jefe y maestro. Para Fernando Verni, que me confió mis primeros casos policiales y para el entrañable Antonio Negro Font, que me hizo posible el sueño de pibe, de poder escribir en GENTE.

LOS PODEROSOS DE SIEMPRE


Mi relación con el poder nunca fue la mejor, quizás porque preguntaba lo que ellos no querían responder y en distintas etapas de mi carrera me tuve enfrentar a desplantes vergonzosos y presenciar situaciones particularmente violentas. Todavía tengo presente el día que Antonio Domingo Bussi me invitó para que recorriera la provincia desbastada de Palito Ortega. Cuando subimos al Ford Falcón verde que nos llevaría, el chofer del entonces general arrancó sin percatarse que el Chino Pantoja, el fotógrafo que me acompañaba, no había terminado subir sus pies. Exaltado por el descuido, Bussi ordenó que detuviera la marcha y ya en tierra firme le dio unos cuántos puntapiés por el descuido. Tanto Pantoja como yo no podíamos creer lo que estábamos viendo, así que después de recorrer un par de cuadras decidimos dar por terminado el relevamiento fotográfico.
Quizás con el único poderoso que me lleve bien, fue con el ex presidente Carlos Menem, que siempre encuentra una salida irónica para capear las preguntas difíciles. En una de las tantas entrevistas que me tocó hacerle, cuando su matrimonio con Cecilia Bolocco comenzaba a naufragar, me anime a preguntarle cómo hacía un hombre de su edad para mantener siempre satisfecha a una mujer mucho más joven que él : “Yo soy como un boy scout, estoy siempre listo. Ahí radica la clave”, me dijo sin sonrojarse para salir rápido del paso. Aunque tiempo después me contó su dolor por la infidelidad de la Bolocco, pero otra vez utilizó el sarcasmo: “No hay dos sin tres (en referencia a su número de matrimonios) para poner una cuota de humor al drama que estaba viviendo.

EL CASO MARIA SOLEDAD


El caso María Soledad marcó a sangre y fuego mi carrera, porque fue una verdadera escuela de periodismo. Allí me tuve que enfrentar a las presiones que genera esta profesión, desde amenazas hasta estar preso por unas horas en un calabazo, pero también tuve el gusto de conocer a una mujer excepcional, como Ada Morales, que a pesar de su dolor, siempre me abrió la puerta de su casa para confiarme algún dato revelador.
Fue en Catamarca donde conocí la ira del diputado Ángel Luque, que molestó por mis investigaciones, me mandó a apretar con unos de sus secuaces, a quien apodaban Zapallo. En vísperas de unas elecciones, Zapallo se presentó en la escuela donde votaba Ramón Saadi, esgrimía en su mano una cadena y apenas entró me encaró: “Me han dicho que Quiroga, el de GENTE está por aquí, si lo ves avísame. porque a ese se la tengo jurada”. Yo no podía creer lo que escuchaba y le prometí que apenas lo viera le avisaba. Y con el corazón en la boca me fui, porque como bien dice el dicho:”Soldado que huye sirve para otra batalla”.
Mi paso por Catamarca también supo de lo que significa estar tras las rejas. Para un aniversario del crimen de María Soledad, habíamos ido con Julio Carrizo a la cárcel para intentar hacer unas fotos de Guillermo Luque en prisión. Los muros eran bajitos y una escalera tijera gigante que nos había prestado un vecino sirvió para que mi compañero llevara adelante el cometido. La osadía duró poco, porque en menos que canta un gallo, una comisión policial nos rodeó y nos llevó detenidos a la comisaría. Allí, por un par de horas estuve preso e incomunicado, hasta que finalmente se aclaró la situación y nos liberaron. Por suerte Carrizo había logrado esconder el rollo y nuestra estadía en prisión había dado sus frutos: teníamos las fotos exclusivas de Luque preso.

HEROES ANONIMOS


Más allá de los personajes famosos que me tocaron entrevistar, esta profesión me regaló la posibilidad de conocer a seres entrañables, que desde su pobreza me enseñaron que a pesar de las dificultades se puede ser honrado. Fue así que conocí a Carlitos Jiménez, un pibe de 10 años, condenado a la pobreza extrema en Chaco. Su papá lo había abandonado y su mamá padecía una enfermedad hereditaria que la tenía postrada a una silla de ruedas. Una tarde calurosa encontró una billetera, con un monto de dinero que le podría haber hecho pasar por un rato sus penurias, pero en lugar de quedársela, decidió devolverla. Su pequeño, pero gran gesto, le valió que lo entrevistara para GENTE. Y que su loable acción encontrará una hada madrina, llamada Mabel Erreguerrena. Lectora de GENTE, Mabel se conmovió con la nota y se comprometió con la historia y durante varios años se encargó que a los Jiménez no le falte un plato de comida en su mesa.
Encontrar soluciones a través de mis notas a problemas acuciantes, hacen que me sienta orgulloso de ser periodista y que a pesar de las obstáculos y las presiones siga apostando por los sueños inalcanzables. Como el día que Barbarita Flores conoció a Las Bandanas. Cómo olvidar su sonrisa cuando en el hotel Alvear se confundió en un emocionado abrazo con sus ídolas, inalcanzables para una niña que no tenía para comer y que con su llanto había conmovido a todo un país.

REGALOS DE LA PROFESION


Mis bodas de plata con el periodismo, me dieron también satisfacciones impensadas, como el haber estado nominado al premio Pléyade por mi nota “El Sida no Mata, La discriminación Sí”. máximo galardón que se otorga en el periodismo de revistas. También tuve la dicha de hacer mi primer documental Benjamín y el Viento, junto a Eduardo Sánchez y Fito Pochat, que tuvieron la generosidad de abrirme las puertas del cine para contar el drama de las escuelas rurales, que se van quedando sin alumnos. El esfuerzo no fue en vano, porque a los pocos meses del rodaje llegó el premio del Festival Internacional de Ushuaia. Y aunque ninguno de esos premios fue buscado, reconozco que fueron un importante aliciente para saber que estaba por la senda correcta.

AMIGOS Y MAESTROS


Probablemente ninguno de los logros periodísticos hubiesen sido posible sin el invalorable apoyo de los fotógrafos que me acompañaron en esas aventuras. Sería injusto no mencionar a Julio Carrizo, compañero entrañable de viajes durante más de 12 años; a Tomas Marini un reportero fuera de serie, que le puso el pecho a las balas durante el santiagueñazo y la fuga y captura del Malevo Ferreyra; a Carlitos Villagra, a Fernando Font y a Jorge Segovia, que no dudan en acompañarme cada vez que los convocó a una misión descabellada y a Antonio Canz, compañero de mis primeras andanzas periodísticas.
Tampoco quiero ser ingrato con mis compañeros de trinchera que me guiaron a lo largo de estos años: De Leo Ibáñez, aprendí la humildad para enfrentar a un entrevistado; de Hugo Martín la perseverancia para no bajar los brazos aún vencido y de Miguel Braillard la tranquilidad para no desesperar ante la mayor adversidad.
Y por supuesto que no puedo dejar de agradecer a esos jefes que en muchos casos sin conocerme confiaron en mí: Jorge Fernández Díaz; Alfredo Leuco: Carlos Russo; Luis Peña; Sergio Clua; Javier Avena y a los que hoy 25 años después me siguen encargando notas: Jorge de Luján Gutiérrez; Gabriel González; Gabriela Cociffi, Hugo Ferrer; Marcelo Dimango; Esteban Raies y me permiten seguir disfrutando del mejor oficio del mundo. Vaya para todos ellos mi infinita gratitud. Y para usted lector que a lo largo de los años me sigue acompañando. Levanto mi copa por otros 25 años más juntos.

lunes, 19 de septiembre de 2011

El MESSI DE LA FACULTAD DE MEDICINA


Juega de delantero en Argentinos del Norte, pero brilla como alumno en la Universidad, donde se convirtió en el máximo goleador de su carrera, con un promedio de 9,80. Su nota más baja es un 8 y el próximo mes se recibe de médico.
Por CARLOS QUIROGA
Fotos: CARLOS VILLAGRA
Esteban Agustín González (25) se ganó con simpatía, don de gente y su olfato goleador el corazón de la hinchada de Argentinos del Norte, que cariñosamente lo llama el doctor, aunque sus gambetas más espectaculares no las dio precisamente en una cancha de fútbol, sino en la Facultad de Medicina, donde desde hace siete años deslumbra con sus notas a profesores y alumnos, con un promedio de 9,80. Y por estos días entrena a full haciendo la pasantía urbana en el hospital de Santa Rosa Leales para conquistar el título más preciado: el de médico: “Si Dios quiere el próximo mes me recibo”, avisa entusiasmado, el abanderado de Medicina.

EL ESTUDIANTE



-¿Cómo se hace para ser un alumno de 10?
-En la Facultad hay que poner mucho esfuerzo, mucha responsabilidad y a veces también te tiene que acompañar un poco la suerte. Pero lo cierto es que hay que sentarse a estudiar, de lo contrario no aprobas. Hubo materias como clínica a la que le dedique 10 horas de estudio diarias. Y por supuesto que también influyò el apoyo de mi familia, de mi novia y de mis compañeros.
- Esteban, ¿estudias por gusto o por disciplina?
-En mi caso particular yo estudio por gusto, amo mi carrera, aunque a veces también debo acompañarlo con disciplina, porque hay días que uno no tiene ganas de estudiar, pero la disciplina te ayuda a encarrilarte y sirve para marcar los límites que uno tiene que tener a la hora de sentarse a estudiar.
- Hoy cuando miraba tu promedio, me pregunte ¿cuál es la nota más baja que sacaste?-
Te soy absolutamente sincero, nunca estudie por la nota y si mi memoria no me falla, la nota más baja que saqué es un ocho en fisiología. A mí nunca me preocupó el ocho, el nueve o el diez, yo siempre estudie para saber. Si me sacaba el diez mejor, porque uno se vuelve más contento, pero nunca renegué la nota, lo importante era aprender para el día de mañana ser un buen profesional. En toda mi carrera solo tuve un ocho, tres nueve y todo lo más diez. Solo baje el diez en los exámenes escritos.
-¿Se puede estudiar y hacer lo que uno le gusta a la vez?
- Sí se puede hacer las dos cosas al mismo tiempo, aunque a veces existen situaciones en las que hay incompatibilidad de horarios y uno debe priorizar. Pero en mi caso no tuve ese problema, pero si debí sacrificar siestas para poder aprovechar al máximo el tiempo. Por ahí robándole tiempo a mi novia, Mercedes Lobo, que a pesar de algunos enojos, siempre me acompaño en lo futbolístico y en el estudio.

EL GOLEADOR


- ¿Y tus aspiraciones futbolísticas por donde van?
- Yo empecé a jugar a los 10 años acá en Argentinos, pero siempre tuve claro que el fútbol era un hobby , nunca pensé en el futbol como una forma de vida, pero no voy a negar que me ha dado y me da muchísimas satisfacciones , aunque te confieso que por ahí si venía un equipo como Boca y me tentaba me animaba .Jejeje.
- ¿En serio?-No, mi elección de mi vida siempre fue ser médico y he estudiado para eso. Aunque no niego que el fútbol es mi segunda gran pasión.
-¿Y futbolísticamente con quién te sentís identificado?- No me siento identificado con Messi, pero es el jugador que más me gusta. Mi referente es Gabriel Batistuta, creo que nunca más tendremos otro delantero igual.
-¿Y cómo ves a la selección?- La veo mal,.. Es increíble, que tangamos el mejor jugador del mundo y no ganemos nada. Hay que armar un equipo que juegue para Messi. Hay que congeniar las estrellas para que sumen para el grupo, ojalá el nuevo técnico lo consiga.
-¿Maradona?-Un genio.
-¿River Plate?-
Una decepción.
-¿Atlético Tucumán?
- Una pasión.
-¿San Martín de Tucumán?
-No existe para mí.
- ¿Julio Grondona?
-Un tipo viejo que está haciendo mal las cosas y se tienen que ir.
-Si tuvieras que hacer un balance, ¿Cuál dirías que es la mayor satisfacción que te ha dado el fútbol?
- Jugar en primera y poder hacer goles. Cuando hago goles no pienso que estoy jugando en Argentinos, sino me imagino que estoy en la bombonera. Es el mayor éxtasis que uno puede sentir. Esa sensación es inexplicable.
-¿Un sueño por cumplir?
- Recibirme y hacer la residencia en cardiología o cirugía cardiovascular. Aspiro irme a rendir en Buenos Aires en algún hospital importante.

martes, 23 de agosto de 2011

PACHAMAMA CON LOS TEKIS


Fieles al ritual incaico, Los Tekis le rindieron culto en Purmamarca, donde le agradecieron por el disco de oro de Mixtura y se encomendaron a ella por el éxito de la gira que iniciaran en Colombia. Con su particular ritmo no sólo conquistaron a los viejos amantes del folklore, sino también a los jóvenes, que ya lo llaman los Beatles del Folklore.
Por CARLOS QUIROGA
Fotos. CARLOS VILLAGRA

Hace 16 años cuando para Los Tekis cantar en Cosquín era un sueño por cumplir y triunfar en los escenarios mayores del folklore una utopía, Isabel Guari, el lutier de sus instrumentos de vientos, junto a Pichón Córdoba los invitaron a participar del ritual de la Pachamama en la comunidad de Hornaditas (ubicada a 15 de kilómetros de Humahuaca) y fue a partir de ahí que con la ayuda de la Madre Tierra sus carreras y sus vidas experimentaron un cambio casi mágico, a tal punto que su música ya trascendió las fronteras internacionales y en los próximos días se aprestan a realizar una gira por Colombia donde su ritmo carnavalero hace furor. Por eso este mes de agosto, fieles a la devoción de esa tradición se reunieron en el majestuoso paisaje de Purmamarca, donde los cerros pintarrajeados de colores sirvieron de marco natural para repetir el ritual: agradecer los logros obtenidos y pedir por la salud de sus familias y por aquellos que ya no están: “La Pacha es nuestra guía y protectora, por lo tanto hoy no le podíamos fallar”, afirma Juanjo Pestoni, percusionista del grupo.

CORPACHADA


La ceremonia empieza a las 12 con el son de erke, (una especie de toque de queda para los habitantes de la puna jujeña), luego Pichón Córdoba convoca a los integrantes de los Tekis: Mauro Coletti; Walter Sader; Sebastián López, José Luis Pucho Ponce; Oscar Valdez y Juanjo Pestoni para dar comienzo con la Corpachada. Cubiertos por un puyo de llama que simbolizan la unión del grupo, elevan con auténtica devoción sus oraciones y le encomiendan sus desvelos. La leyenda dice que cada mes de agosto, de hace incontables años, el caos y la muerte amenazan a la Pachamama. Después de 12 horas de lucha, al mediodía la tierra está a punto de ser vencida: el fuego amenaza quemarla y acabar con su fecundidad; el agua la acecha para inundarla y terminar con su consistencia: el aire quiere dispensarla y destruir su estabilidad. Pero Los Tekis han concurrido para salvarla y convencidos que lo lograran, alimentan la corpachada (el pozo que hace de altar ceremonial) con maíz, quinua, hojas de coca, cigarrillos y distintas bebidas alcohólicas para que recupere sus fuerzas. Y parece que lo han logrado, porque como por arte de magia, el silencio sepulcral del lugar toma ritmo de carnaval, al son de sus voces, guitarras, bombos y quenas. Mientras Walter Sader sahúmela con coa la guitarra y Mauro Coletti challa (riega) con vino sus quenas y sikus, para alejar la envidia y las malas ondas.

LOS COMIENZOS


Eran apenas unos adolescentes cuando el bichito de la música unió a Oscar Pipo Valdez (guitarra); Mauro Coletti (aerófonos andinos), Sebastián López (charango) y Juanjo Pestoni (percusión) en la mítica peluquería jujeña de los hermanos Chañi, un lugar emblemático, donde el ruido de las navajas se combina con las quenas, bombos y guitarras de sus propietarios Amaranto, Juan, Luis y Cristóbal Chañi, que entre corte y afeitadas enseñan a los chicos sus primeras notas. “Sonábamos bien, así que los hermanos Chañi no fueron invitando para que participáramos en distintos festivales y así sin querer queriendo, como si se tratara de un juego nacieron Los Tekis”, rememora Mauro Coletti.
-¿Por qué Los Tekis?
- Porque Tekis se le dice a los chiquitos que llevan las madres collas en sus espaladas y por ese entonces precisamente nosotros éramos unas guaguas.
El debut artístico de Los Tekis fue en 1991 en la Serenata a Cafayate y en 1995 el escenario de Cosquín los catapultó a la fama, a la par que su tema Cómo has hecho, hacía furor en los boliches argentinos como primer remix del folklore. Fue entonces cuando se sumaron las dos patas cordobesas del grupo: Pucho Ponce y Walter Sader, que según bromean hoy solo tienen de cordobeses el nacimiento, porque musicalmente son jujeños.

LOS BEATLES DEL FOLKLORE


Aunque su música siempre estuvo asociada al folklore, Los Tekis se animaron a fusionar el carnavalito con otras corrientes y estilos como el candombe y el rock. “Eso tiene mucho que ver con nuestra adolescencia rockera, así que a la hora de componer no podemos negar esa influencia y eso se nota especialmente en el disco “Somos”, donde el pelado Gustavo Cordera y Cóndor Sbarbatti de la Bersuit ponen sus voces en el tema Viejo Carnaval”, admite Sebastián López. Quizás por eso muchos jóvenes lo apoden Los Beatles del folklore.
“Pero a la hora de armar un disco siempre tenemos puentes a otros estilos de música. No sólo grabamos rock, sino también cuarteto con la Mona Jiménez y tangos, porque nosotros disfrutamos haciendo música, respetando lo que uno hace y al sentimiento que uno toca. Los géneros son sólo un nombre”.

LOS DIABLOS DEL CARNAVAL


Muchos en Jujuy están convencidos que Los Tekis son el mismo diablo, de lo contrario su música no desataría las pasiones desenfrenadas que genera, donde las inhibiciones quedan a un lado, dando origen a una energía arrolladora capaz de soportar varios días de desvelos con tal de bailar y cantar. Creencia que toma cuerpo para el carnaval, cuando se disfrazan de diablos e integran la comparsa Pocos pero locos: “Muchos de nuestros temas sirvieron para que se formaran parejas. En la pate divertida del tema el chango la manoteo a la chica y comenzaron a bailar y luego se fueron a cometer sus diabluras, de donde nacieron varios hijos”, cuenta Juanjo Pestoni, que no hace nada para desmitificar las versiones que circulan sobre ellos, más bien la ratifica: “El diablo mete la cola, enamora y hay que hacerse cargo”.
-¿Y si ustedes son el diablo, deben ser tan chiniteros como él?
-Nosotros somos gente muy seria, ya hemos tenido nuestra etapa de diablo, ahora solo nos divertimos con el diablo.
-¿Tienen un pacto con el diablo para mantenerse unidos?
-No, la base está en que somos una gran familia. Te diría más estamos al borde de lo pesado, porque venimos un lunes de dos meses de gira juntos y el miércoles ya nos juntamos de vuelta para comer un asado. Somos inseparables. Y precisamente esa mancomunión que nosotros tenemos se traslada al escenario. Para nosotros hacer música no es un laburo, sino un privilegio que nos dio la vida de poder vivir y hacer lo que nos gusta al mismo tiempo”, coinciden los seis integrantes a la vez. .



jueves, 14 de julio de 2011

HISTORIAS, MITOS Y SECRETOS DE LAS RIÑAS DE GALLO



Hoy la actividad gallera se sigue desarrollando con la misma pasión de antaño pero, a diferencia de otras épocas, se preserva la integridad del animal. Ya no pelean hasta morir y su cría se ha profesionalizado tanto, que algunos galleros venden al animal con un video de sus combates. En Termas de Río Hondo se disputa el campeonato mundial.
Por CARLOS QUIROGA
Fotos: GUSTAVO TARCHINI
Corrección: Profesora PILAR CORTÉS
Tan remotas como los juegos de taba y las corridas de toros, las riñas de gallos arribaron a nuestro país en los pesados galeones de los conquistadores españoles que, en su afán por hacer fortuna, sometieron a los gallos a un largo y extenuante viaje. No fue en vano, ya que la tradición gallera no tardó en arraigarse en estas tierras, especialmente en
Santiago del Estero, donde la actividad es legal y cada fin de semana cientos de aficionados se vuelcan a los reñideros, como los hinchas de fútbol a las canchas.
En el Gran Chaparral, Adolfo Enrique Saavedra, es el anfitrión de las contiendas y antes que se lo consulte sobre la crueldad de las riñas, se encarga de aclarar:” El gallo se llama de riña no por casualidad. Es un animal que nace para pelear y, si no pelea, se muere. No es -como dicen los detractores- que son entrenados para matar. Con la cría y riña de gallos lo que hacemos es preservar una especie que se perdería".
Hecha la aclaración, Saavedra lamenta que en muchas provincias todavía se siga considerado a la actividad como ilegal e insta a que sigan el ejemplo de Santiago, en donde las riñas son un deporte más, como las carreras de caballo: “Yo cada vez que organizó una reunión, pago mi correspondiente permiso en la Dirección de Deportes, que se encarga de enviarme el juez para la riña y solicito también el servicio adicional en la comisaría para que me envíen un policía de custodia”. Allá lejos en el tiempo quedó la época en que la ley perseguía a los galleros. Un viejo aficionado recuerda que, cuando las riñas eran clandestinas, un avión de la policía solía recorrer la zona y cuando pasaba por el patio donde se realizaban, “los hombres tomábamos un pañuelo simulando que estábamos bailando para evitar que nos identifiquen. Eso sí, si el avión volaba bajito íbamos todos en cana, no había chacarera que nos salve”.

CRIADEROS



La tenencia y cría de gallos es una afición tan extendida como las mismas riñas. Lidro Cáceres heredó de su padre esa pasión, aunque sostiene que: “Hoy en día el viejo criador de gallo ya no existe. Acá en Santiago existe el potencial comprador. Allá perdido en el tiempo quedaron las épocas en que los criadores nos preocupábamos en cruzar gallos por sus buenos antecedentes familiares y seleccionarlos por la estridencia de su canto. Hoy el que dispone de un dinero, viaja a Brasil a comprar directamente sus animales. En cambio, los galleros de menores recursos, aprovechamos los torneos internacionales para comprar buenos animales”.
Hoy la raza que predomina en las riñas es la brasilera, que es una mezcla de Calcuta con Assel y que ha dado excelentes resultados porque es rápida, de buena espuela y resistente al combate.
Según cuentan los que viajaron a Brasil, la venta de los gallos de riñas se ha profesionalizado tanto que algunos galleros ofrecen al animal con un video de sus combates. Los pocos que siguen empecinados en cruzar gallos sostienen que siempre tratan que el gallo tenga una cruza de Assell, porque es el gallo más resistente y ahora lo están tratando de cruzar con Canario, para que le dé mayor velocidad. La clave radica en encontrar la fórmula perfecta. Y los antecedentes familiares siguen siendo considerados, aunque no son infalibles, porque hay gallos que son muy buenos peleando, pero regulares padres.”Para reconocer a un gallo bueno hay que escucharlo cantar. Si canta cortito y grueso es de buena raza”, afirma Ernesto Iñiguez.

UN DURO ENTRENAMIENTO



Al igual que los boxeadores, los gallos son sometidos a un estricto entrenamiento. “Por lo general comenzamos a entrenarlo a partir de los 15 meses. Y para el bautismo de fuego, procedemos a cortarle la cresta, las espuelas y la mejilla, porque son zonas blandas, que dejan un flanco débil para que con buena mordida se termine el combate- comenta Cáceres-.Un gallo bueno debe saber pegar con las espuelas, ser de raza fina (léase resistente) y tener buena boca para tirar picotazos potentes”
Un aspecto importante del entrenamiento son los toreos, que se realiza con la presencia de otro gallo. Son peleas cortas, que duran entre 10 y 15 minutos. Para esas ocasiones le ponen piqueras que hacen de protectores para que no se lastimen y en las espuelas en lugar de las púas, se les coloca pequeños guantes.” Aunque cuando probamos un gallo a fondo y queremos saber si pega bien con las espueleas, le colocamos las púas y lo enfrentamos con otro gallo que está destinado al sacrificio y que aquí llamamos persuco, que en términos galleros significa un gallo ya descartado”, explica Cáceres.

TEMPORADA GALLERA



Las riñas responden a un cronograma que se ajusta al proceso natural de las plumas. En Santiago comienzan a fines de mayo, cuando algunos gallos ya han emplumado (las aves cambian su plumaje por completo una vez al año), y se extienden hasta diciembre, cuando las altas temperaturas obligan a una pausa.
Entre enero y abril, los galleros ponen especial cuidado en las plumas: “Es entonces cuando le damos vitamina b y mejoramos su alimentación. Por lo general le damos semilla de girasol y alimentos que tengan mucho aceite, para que las plumas le salgan blandas y no se le rompan con facilidad”, comenta Cáceres.
Los encuentros están pautados en forma semanal y la pasión gallera se extiende por casi todo el territorio provincial, aunque entre las zonas que son más galleras sobresalen la Capital santiagueña, La Banda y Termas de Río Hondo, donde para las vacaciones de julio se realiza el campeonato mundial.

NOCHE DE RIÑA









Es viernes a la noche y el reñidero “El Gran Chaparral” se ha comenzado a poblar. Criadores de zonas cercanas llegan con pequeñas valijas de madera, que se denominan “galleras” trayendo a los que serán los protagonistas de la velada: “Lo ideal es aislar al gallo por lo menos 24 horas antes de la pelea. Hay que tener cuidado porque si se escapan y pisan una gallina tienen un gran desgaste de energía”, advierte Martín Coronel.
Entre los que darán batalla en el Gran Chaparral, sobresale un gallo tuerto: “No hay que subestimarlo- sostiene el Negro Saavedra-. Hay gallos tuertos que son unos maestros, es tanta la habilidad que tienen que cuando lo muerden se dan vuelta y ofrecen el lado tuerto. Además estos animales a la hora del combate tiene ventaja en el peso, porque puede pesar un poco más, que él que tiene vista normal”.
Ha llegado la hora del pesaje y al igual que en los campeonatos mundiales, los propietarios y segundos siguen con atención la ceremonia, ya que de acuerdo al peso se determinará el rival.: “. En ese sentido nadie da ventaja, sería una locura por ejemplo pelear con dos onzas menos”- comenta Saavedra. Y de los 6 gallos solo dos coinciden en el peso, así que la velada se reducirá a una sola pelea.
Después de la conformidad de las partes, el juez de la pelea da la autorización a los segundos para que vayan calzando las púas. Con especial cuidado las púas son aferradas a las patas con cinta. Todas ellas presentan una hendidura donde calza perfectamente el pequeño muñón del espolón, previamente amputado.
La duración de las riñas está en directa relación con las "armas" que presentan los contrincantes: A mayor peligrosidad, menos dura la pelea: “Acá en Santiago utilizamos púas plásticas y no de acero como sucedía en otras épocas o sucede en otras partes. Acá preferimos utilizar las púas mansas”, sostiene Saavedra. En otros países de América Latina, se emplean navajas afiladas que generan una disminución en los enfrentamientos debido a las heridas mortales que se provocan las aves.
Mientras los segundos realizan los precalentamientos de los gallos, con masajes en las patas, los propietarios concretan la apuesta. No se compran boletos como en el hipódromo, sino que se va apostando a voz de cuello y no hay un tiempo para dejar de apostar, se puede jugar hasta el último minuto de la pelea, siempre y cuando haya del otro lado alguien dispuesto a aceptar: “Es un deporte popular, que no se caracteriza por ser de gente acaudalada, así que cada uno juega de acuerdo a lo que le da el bolsillo”, afirma Saavedra.

SEGUNDOS AFUERA

Seguidamente los animales son puestos dentro del brete (el ring gallero), que mide 2,50 por 5 metros .El juez revisa a los contrincantes y pasa un algodón empapado en alcohol sobre el plumaje, para constatar que no tenga ninguna sustancia venenosa, que producto de una mordedura pueda debilitar al rival.
La riña está pautada a una hora de combate, en tres rounds de 15 minutos cada uno, con descansos de cinco minutos. La pelea se muestra pareja, no se sacan mucha diferencia. Inclusive hay algunos apostadores que se juegan por una “Tabla”.
Al igual que en el boxeo en la jerga gallera existen numerosos modismos para designar las diversas alternativas del combate. Se llama "tope" al ataque con las patas, "puñalada" al golpe de púa, y "mordida" a los golpes de pico. Aunque el golpe más temido es el de “cuadro”, porque cae en la zona de la nuca o la cabeza y deja muerto al animal.
Entramos en el último tramo del combate, la fatiga en los animales se hace sentir. Por momentos ninguno quiere riña, hasta que un picotazo sirve para reanimar la pelea. Una puñalada deja en el suelo al de cinta negra. El juez comienza el conteo (tiene un minuto para levantarse), la tribuna se exaspera: “Ese gallo no tiene agallas” y el gallo como si hubiera escuchado el reclamo revolotea las plumas y vuelve a dar pico. Pero la superioridad de su contrincante lo vuelve a hacer besar el brete y su dueño antes de que el juez reinicie el conteo decide por dar terminado el combate: “Ahora ya no es como antes que se peleaba hasta que el gallo se muera. Esto ha cambiado y muchas veces cuando vemos que el gallo no se va a recuperar preferimos tirar la toalla en beneficio del animal”, comenta Saavedra que aplaude la medida.
La riña ha terminado y las apuestas se pagan sin chistar, porque todos saben que siempre hay revancha.

jueves, 16 de junio de 2011

ESCUELA DE LA PATRIA





Pasaron 198 años y el sueño de Belgrano todavía sigue inconcluso. La historiadora Marta Dichiara que rastreó hasta en las cuentas de la logia Lautaro los fondos donados por el prócer para la construcción de la escuela en Tucumán, pide a las autoridades que se termine de una buena vez el proyecto para que el creador de la bandera por fin pueda descansar en paz.

Por CARLOS QUIROGA
Fotos: CARLOS VILLAGRA
Corrección: Profesora PILAR CORTÉS

“Cuando reflexiono que nada hay más despreciable para el verdadero patriota, que el dinero o las riquezas, he creído propio de mi honor, destinar los 40 mil pesos, (que había cobrado como premio por su desempeño en la Batalla de Salta) para la dotación de cuatro escuelas públicas en Tarija, Salta, Tucumán y Santiago del Estero”. La frase que parece salida de cuento de ciencia ficción para los tiempos en que la avaricia y la corrupción salpican a la dirigencia política, forma parte del legado del general Manuel Belgrano, que debió esperar 186 años y 100 días para que la Escuela donada para Tucumán se haga realidad. Voluntad que hubiese quedado en la nada, si no fuese por el trabajo de investigación y la perseverancia de la historiadora Martha Dichiara de Altamirano (77), que a lo largo de 30 años rastreó con paciencia y dedicación los destinos de esos fondos, para cumplir con la voluntad del prócer.
La admiración y pasión que sentía Martha Dichiara por Belgrano, hizo que mientras se desempeñaba como directora del archivo de la Secretaría de Educación, se detuviera en una nota de Bernardo de Irigoyen dirigida al gobierno de Tucumán, en la que hace referencia a los fondos pertenecientes a la escuela donada por Manuel Belgrano: “El hecho me llamó profundamente la atención y después de mucho andar, llegue a la conclusión que la escuela que había ordenado construir Belgrano nunca se había hecho”. Fue entonces cuando el bichito de historiadora la llevó a peregrinar por distintas instituciones, para determinar que suerte habían corridos esos fondos. En 1974, llegó al Ministerio de Economía de la Nación, con una carta de presentación de los diputados nacionales por Tucumán para solicitar una audiencia con el contador general de la Nación, con el tesorero general y con el director de duda interna: “Cuando Me preguntan para qué, le contestó que para reclamar una deuda que tenía la Nación con la provincia desde hace 180 años. Me miraron como diciéndome que estaba loca, pero las credenciales que había presentado, los obligaba a tenerme un mínimo de respeto. Así que me permitieron hablar con José Ber Gelbard, que por entonces era el titular de la cartera, quien quedó fascinado con mi historia y fue así como se me abrieron las puertas del Banco Central, para continuar con mi investigación”.

LA VIUDA DE BELGRANO



“En ese buscar entre las actas de crédito público, me di con una cuenta de la logia Lautaro y cuando ya estaba desalentada recurrí como última esperanza a la Biblioteca Nacional, en donde pido que me den las actas del crédito público de la provincia de Buenos Aires y milagrosamente aparecieron los fondos que había donado Belgrano. Estaban allí, nadie los había tocado y habían sido transferidos automáticamente hasta 1908, que salió una ley que decía que esos fondos iban a ser destinados a la construcción de la ciudad de La Plata, hasta que los legítimos beneficiarios los reclamaran. No lo podía creer, casi me muero de la emoción. Pero debo confesar que cuando concluí con mi tarea quedé medio vacía. Habían sido varios años de dedicarme a este prócer e inclusive mucho de mis amigos que me veían triste, pero con la satisfacción del deber cumplido, me cargaban diciendo que era la viuda de Belgrano”, recuerda Dichiara.

EL RECONOCIMIENTO DE LA DEUDA



La investigación histórica había concluido, pero todavía había un largo camino por recorrer para concretar el sueño de Belgrano. Así fue que Martha Dichiara comenzó un largo peregrinar por distintos despachos oficiales, a los fines de que alguien con poder político, logre rescatar esos fondos para la provincia de Tucumán. En 1993 el entonces diputado nacional por Tucumán, Miguel Nacul, se interesó en su investigación y decidió pelear desde el Congreso el reintegro de los mismos, hasta que en julio de 1994, consigue que sean incluidos en el presupuesto anual, a través de un proyecto de ley.
“Los 10 mil pesos fuertes, que había donado Belgrano en 1813 para la provincia de Tucumán, al convertirlos se traducían en 18 kilos de oro y con ello se podía equipar todo un ejército-puntualiza Dichiara-. La cotización de la actualización que hizo el Banco Central de la deuda equivalía a la renta líquida de la Nación en un año, pero como era imposible pretender cobrar eso, aceptamos que no nos paguen los intereses y que nos den solamente el capital simple, con un 6 % de interés anual. En base a ese cálculo sacamos que la deuda rondaba los cinco millones de dólares, que nos permitirá construir una escuela de última generación con laboratorios, salas de computación y lo último en tecnología para Tucumán.

INAUGURACIÓN Y FRUSTRACIÓN



Pero tuvieron que pasar 3 años más, hasta el 26 de julio de 1999, para que Marta Dichiaara cumpliera en parte con el sueño del prócer y se inaugurara la primera parte de la Escuela de la Patria, en la manzana comprendida por las calles: La Rioja, Bolívar, Lavalle y Jujuy.
“De los 5 millones de dólares que se destinaron para la construcción de la escuela llegaron sólo dos millones para ejecutar la primera parte, pero los cambios de gobierno, más un poco de decidía de las autoridades, hicieron que ese dinero faltante nunca llegue y que el sueño del prócer quedará incompleto”, lamenta Dichiara.
“Todavía falta que se construya en el piso superior, los talleres, las aulas y toda la parte conmemorativa para homenajear a Belgrano. Solo hace falta que las autoridades provinciales reclamen ante la Nación lo que nos están adeudando por ley”. Yo no voy a descansar hasta que la voluntad del general Manuel Belgrano se cumpla por completo. Lo único que espero es poder llegar con vida para cerrar uno de los trámites burocrático más largo de la historia Argentina, que crease o no, ya lleva 198 años”, afirma Dichiara.

viernes, 27 de mayo de 2011

EL ESTECO, EL EDÉN DEL VINO




Sus vinos de alta gama, que desde hace ya varios años han conquistado los mercados internacionales más exigentes y su hotel cinco estrellas, donde bañarse en vino ha dejado de ser un privilegio exclusivo del dios Baco, convierten a la bodega en un lugar de ensueño para los desprevenidos turistas que visitan Cafayate.
Por CARLOS QUIROGA
Fotos: ANTONIO TITA
Corrección: Profesora PILAR CORTÉS

Ubicada estratégicamente en el corazón del Valle Calchaquí, entre el cordón nevado del Aconquija y el arenoso suelo cafayateño, la bodega El Esteco sorprende al turista a la vera de la ruta nacional 40 por su estilo colonial, invitándolo a conocer un lugar de ensueño, no sólo por lo majestuoso de su construcción, sino también por la excelencia de sus vinos de alta gama, que desde hace ya varios años han conquistado los mercados internacionales más exigentes. Para un desprevenido visitante ingresar a sus instalaciones puede ser un camino sin retorno, porque además de lo descrito, la bodega termina atrapándolo con su hotel cinco estrellas, donde bañarse en vino ha dejado de ser un privilegio exclusivo del dios Baco y se convierte en realidad en el primer wine spa de Argentina.
Hoy, con más de 400 hectáreas sembradas, en las que predominan las plantaciones de Cabernet Sauvignon, Malbec y Torrontés, El Esteco produce 4,5 millones de kilos de uva. La capacidad de vasija alcanza los 8,5 millones de litros. De los cuales 1,5 millones de litros se venden en el mercado interno y 2,5 millones se comercializa en Canadá, Estados Unidos, Inglaterra, Suiza, Dinamarca y Japón , mientras que el resto de la producción se guarda en barricas y tanques para añejarlos y procesarlos para los años siguientes: “El Esteco elabora únicamente vinos Premium para segmentos de alta gama, reconocidos internacionalmente por la prensa y en los principales concursos mundiales”, afirma el enólogo Alejandro Pepa, principal responsable de la producción. Esos vinos se caracterizan por tener una gran personalidad, que sobresalen por su color y aromas intensos y buena concentración de uvas. Hoy su portfolio está compuesto por las líneas: Elementos, Don David, Ciclos y su vino icono, Altimus”.

VINO ICONO



“Entre las metas que nos fijamos, cuando el grupo Peñaflor se hizo cargo de la bodega, estaba disminuir la cantidad de vino que producíamos, pero aumentar significativamente su calidad para sacar un vino que, por sobre todas las cosas, sea exclusivo de la bodega y así surgió la idea de hacer el vino Altimus. Con una libertad inusual desde la gerencia de la empresa, nos propusieron a los etnólogos y a los ingenieros, que elaboráramos el vino que a nosotros nos gustaría tomar, sin medirnos en gastos. El único límite que nos habían fijado era que solamente podíamos producir cinco mil litros en una bodega que hacía 5 millones de litro de vinos anuales. De hecho, ni lerdos ni perezosos aceptamos el desafío y pusimos lo mejor de nosotros para cumplir, como quien dice, con el sueño de pibe”, afirma Pepa.
“Luego de evaluar cuidadosamente las posibilidades de prueba y error, decidimos que el Altimus iba a ser una mezcla de varietales, compuesto por las mejores variedades de cada año. En el año 2000 fueron dos variedades Malbec y Cabernet, y en el Altimus del 2006, que es el que está actualmente en el mercado, mezclamos cuatro variedades: Malbec, Cabernet Sauvignon, Bonarda y Tannat . Hoy, para la cosecha 2010, tenemos previsto elaborar 20 mil litros de Altimus. Se ve que el vino no fue tan malo- bromea Alejandro Pepa- por lo que nos ampliaron el margen-. La mitad de lo que lo que producimos lo exportamos y el resto queda en la Argentina. Hoy una botella cuesta en el mercado alrededor de $200 y solo se consigue en vinotecas y algunos restaurantes de hoteles cinco estrellas”.

TIERRA PRIVILEGIADA



Alejandro Nesman, ingeniero agrónomo, responsable de los viñedos, sostiene que el clima dual que tiene Cafayate, ubicado estratégicamente entre la cadena montañosa de la sierra del Cajón y las yungas tucumanas, a 1.700 metros sobre el nivel del mar, juega un rol primordial a la hora de elaborar un buen vino. La amplitud térmica que hay entre el día, cuando la temperatura llega a los 40 grados, y la noche, en que desciende hasta 15 grados, le gusta mucho a la uva durante la etapa de maduración, porque le permiten que se fije mejor la coloración y los compuestos aromáticos, dándole al vino más cuerpo y mejor sabor. Esa es la particularidad que hace únicos y muy demandados a los vinos de Cafayate”.
“Otro factor primordial que sobresale en la excelencia de nuestros vinos es el trabajo casi artesanal que ponemos en funcionamiento a la hora de cosechar- explica Nesman-. La Vendimia se distingue por una cosecha muy cuidada, es un proceso más lento, se eligen los horarios de temperaturas más frescas y para el transporte se utilizan tachos o bins, no camiones. La diferencia con la vendimia de otros tipos de vinos de menor calidad es que la cosecha es completamente manual y con gente de la zona que conoce el producto. Además, El Esteco tiene la particularidad de ser una bodega State, es decir, la distancia entre los viñedos y la bodega no supera los 15 minutos. Esto significa que las uvas se mantienen intactas desde su recolección y llegan con todas sus potencialidades en óptimo estado”.

PIONERA



El Esteco nació en 1892 cuando los hermanos David y Salvador Michel – de origen vasco-francés - plantaron las primeras viñas en el lugar, atraídos por las condiciones únicas del terreno en el Valle de Cafayate. La Bodega adquirió su nombre en honor a la “Leyenda de El Esteco”. Según este relato, El Esteco fue una ciudad opulenta en el norte de Argentina que en 1692 quedó sepultada por un terremoto. Luego de los intentos de recuperar los tesoros de la ciudad, se comprendió que la verdadera riqueza provenía de sus suelos: sus cepas únicas, fecundadas en un terruño privilegiado, eran su verdadero tesoro.
La Bodega se destacó a través del tiempo por su carácter pionero y en la actualidad pertenece al grupo Peñaflor, uno de los principales exportadores de vinos a nivel mundial, dueño de las bodegas Trapiche, Santa Ana, Finca Las Moras, y Andean Viñas.

HOTEL CINCO ESTRELLAS



A la par de la bodega y como si fuera una prolongación de la misma, manteniendo el estilo colonial que la caracteriza, el hotel Patios de Cafayate de la prestigiosa cadena hotelera Starwood atrapa al visitante con una variedad de paisajes donde el verde de las viñas floreciendo predomina y se fusiona en admirable armonía con el cordón de montañas de la Cordillera de los Andes. Arroyos, de aguas cristalinas y el canto de los pájaros, conforman el marco ideal para lograr el reposo y la tranquilidad necesarios para un buen descanso. La mayoría de las habitaciones y suites se encuentran en los edificios originales, los que fueron cuidadosamente restaurados por completo y adaptados a las necesidades del viajero moderno. Cada habitación está exclusivamente decorada con muebles antiguos y alfombras artesanales.
“El hotel tiene un concepto de casa más que de hotel, porque queremos que el visitante se sienta a gusto- afirma Alejandro Romero, gerente del hotel-. De hecho es un hotel temático y entre los programas que ofrecemos sobresale la vendimia de lujo, donde el huésped participa activamente de la cosecha. Inclusive hasta tiene la posibilidad de elaborar su propio vino. Para ello es necesario que el turista venga cuatro veces al año y al final de la vendimia elabora sus propios cortes y se termina llevando cincuenta cajas de vinos, a las que nosotros le personalizamos la etiqueta con el nombre que le quiera poner. No es un programa masivo, pero es un alternativa interesante para aquel turista que quiera profundizar en la elaboración del vino”.

WINE SPA



Si hasta hace poco estaba convencido que bañarse en vino era un privilegio reservado exclusivamente al dios Baco o el sueño de un borracho empedernido, se equivoca, porque gracias a la revaloración de antiguos ritos, se sabe que el vino es un inmejorable promotor del relax corporal, un estimulante de la salud y del rejuvenecimiento de la piel, con el consiguiente efecto sobre la calidad de vida. Siguiendo esa línea, el hotel Patios de Cafayate erigió el primer wine spa de la Argentina, donde zambullirse en un tonel burbujeante de Cabernet Sauvignon o de Torrontés ya es una realidad.
“En el wine spa buscamos combinar el placer de la uva en todos sus sentidos. Su riqueza en polifenoles combate el envejecimiento prematuro de la piel, dejándola tersa, joven y elástica, a la vez que el vino envuelve con su magia todos los sentidos. Bienvenidos al lugar que le devuelve la vida en vino- exclama sin exagerar, Alejandro Romero, gerente del hotel, a la hora de presentar el exclusivo spa-. “La idea fue rescatar la vino terapia practicada dese la edad media, cuando se mezclaba el vino con hierbas medicinales buscando efectos curativos a distintas enfermedades”, concluye Romero.

viernes, 1 de abril de 2011

A 9 AÑOS DE LA DESAPARICIÓN DE MARITA VERÓN


Susana Trimarco perdió a su hija en manos de la trata de blanca, pero con tesón y coraje dio batalla a ese aberrante delito y ya logró recuperar a más de 600 chicas de la esclavitud sexual. Su historia llegó a la televisión en Vidas Robadas. Pero, según confiesa, su objetivo recién estará cumplido cuando su nieta Micaela se reencuentre definitivamente con su madre.

POR CARLOS QUIROGA Fotos: FERNANDO FONT Y CARLOS VILLAGRA La trata de blanca afecta a 27 millones de personas en todo el mundo, la mayoría de ellas mujeres y niños pobres. Es el tercer negocio ilícito global, solo superado por el narcotráfico y el tráfico de armas.”La actividad crece en la Argentina de la mano de la ‘connivencia policial y política’ y la “escasez de acciones orientadas a investigar y perseguir este delito”, afirma el informe de la Organización Internacional para las Migraciones. Sin embargo, en Tucumán existe una mujer que, a pesar del dolor de haber perdido una hija en manos de esas organizaciones, no se dio por vencida y lucha día a día para que otras jóvenes indefensas no corran la misma suerte de Marita: “Es cierto que las redes de prostitución son muy poderosas, mueven fortunas y compran a la justicia y a la policía, pero nosotras las madres la vamos a vencer, porque ellos no tienen el poder que tiene una madre, que es capaz de dar la vida por sus hijos. Las mafias, por más poderosas que sean, no pueden luchar con nuestro sentimiento de madre”, sostiene Susana del Valle Trimarco (57), que empezó una lucha sin cuartel contra estas mafias el 3 de abril del 2003, cuando una red de prostitución secuestró a su hija, María de los Ángeles Verón .Su batalla no pasó desapercibida y recibió el Premio Internacional al Coraje de manos de la entonces Secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice. “Nunca lo hubiera soñado. Y de haberlo soñado, hubiera sido una pesadilla. ¿Quién puede alegrarse de que le den un premio por buscar a una hija desaparecida de la que llegan datos intermitentes y aterradores?, se pregunta desconsolada, mientras bebe un vaso de agua tratando de sobreponerse al trago amargo que le tocó vivir a lo largo de los últimos 9 años: “Al principio me costaba creer que mi hija había sido secuestrada por una red de prostitución, eso me sonaba más a una película de ciencia ficción. Qué me iba a imaginar que a espaldas mías existía este submundo oculto. A medida que avanzaba con la investigación, nos acercaban datos falsos para desorientar nuestra búsqueda, pero nosotros igual seguíamos, porque no estábamos en condiciones de desechar ninguna pista.”

DE AMA DE CASA A INVESTIGADORA


De un día para otro, Susana, que había sido educada en un colegio religioso y que guardaba las normas conservadoras que impone una sociedad pacata como la de Tucumán, dejó de ser ama casa y salió a caminar la noche en busca de un dato que la pudiera llevar a su hija: “En ese largo peregrinar por los prostíbulos de la Argentina, fuimos encontrando varias chicas que habían sido secuestradas al igual que Marita y que necesitaban de nuestra ayuda para salir del infierno en el que estaban sumergidas. Por eso cuando hacían los allanamientos yo les hablaba y les decía que aquellas que estén en contra de su voluntad, me lo dijeran, que yo las iba a sacar de ahí. Muy pocas se animaban a hablar, porque estaban aterrorizadas. Las madamas la dominan con solo mirarlas. Yo me daba cuenta de que estaban en contra de su voluntad, porque estaban con la cabeza gacha y lloraban cuando les hablaba. Ellas no podían hacer nada, por que en ese submundo, el perro tiene más valor que ellas. Pero con coraje y tesón ya hemos recuperado a 600 chicas”, suspira, aliviada.

SU CASA, UN REFUGIO


Su casa se ha convertido en una especie de cuartel general, a donde acuden cientos de madres desesperadas en busca de su ayuda ante la desaparición de una hija, ayuda que se torna invalorable debido a la experiencia que cuenta: “Muchas de las chicas que recuperaban no tenían a donde ir, así que las terminé trayendo a mi casa para que tuvieran un lugar seguro en donde estar. No se puede dejar solas a las víctimas, porque les queman las casas, las amenazan de muerte y las vuelven a secuestrar. Es por eso que yo decidí darles cobijo. Cuando salen de la prostitución quedan en un estado de indefensión total. Desgraciadamente, hay muchos padres que se resisten a recibirlas Por eso he creado una Fundación para poderlas ayudarlas. Esas chicas no solo necesitan ayuda material, sino también psicológica para poder reinsertarse en la sociedad.” Hoy, después de nueve años de lucha infatigable, Susana encontró un poco de alivio en su tarea, y logró que el Congreso de la Nación esté próximo a aprobar una ley que endurezca las penas contra los tratantes.

UNA AYUDA INVALORABLE

“Muchas de esas chicas que recuperamos estuvieron con mi hija y fueron ellas las que nos dieron las pistas para seguir la búsqueda. Blanca Vides vio a Marita en la “whiskería” El Desafío en La Rioja. Fue a mediados de 2003 y, según nos contó ella, las ayudó para que se pudieran escapar con un camionero de Rosario y les dio una carta para mí. Pero la carta jamás llegó a destino porque la policía de La Rioja al detener el camión en el puesto caminero, las hizo bajar a todas porque estaban en ropa interior y sin documentos y finalmente las devolvió a los proxenetas. Blanca, por suerte, logró salvarse porque iba escondida bajo la cama de la cabina. Más tarde nos enteramos que M, la chica que traía la carta, terminó con un tiro en la cabeza y la tiraron en un dique en La Rioja. Y a mi hija la golpearon hasta dejarla mal muerta por buchona”. Desde que comenzó su lucha contra la trata de blancas, las amenazas jamás cesaron, pero Susana decidió enfrentarlas: “El dolor de madre por el secuestro de mi hija me hizo perder el miedo. Fue esa fuerza interior la que me llevó a meterme en los prostíbulos, sin tener presente los riesgos que corría si me descubrían. El día que fui a la embajada de Estados Unidos a notificarme del premio, me llegó un mensaje de texto intimidándome para que me detuviera, pero no voy a claudicar. Las amenazas son como callos, que a esta altura no hacen mella en mi lucha”, sostiene desafiante.

VIDAS ROBADAS


El jueves 3 de abril del 2008, la ficción y la realidad convergieron en Tucumán. Soledad Silveyra dejó las grabaciones para acompañar a Susana Trimarco, la madre coraje que inspiró su personaje de Roxy en “Vidas Robadas”, en el sexto aniversario de la desaparición de su hija Marita Verón. Y yo tuve el privilegio periodístico de ser testigo exclusivo de un encuentro donde no faltaron las emociones ni las lágrimas y el compromiso de luchar juntas para que el Congreso apruebe una ley que envíe a la cárcel a los proxenetas que prostituyen impunemente a niñas y mujeres en nuestro país. Susana Trimarco- Te agradezco de corazón que en uno de los días más tristes de mi vida me estés acompañando, Solita. Siempre te caracterizaste por tu sensibilidad, acompañaste a las Madres de Plaza de Mayo y hoy estás a mi lado. Gracias, infinitamente gracias. Soledad Sylveira – No son cosas para agradecer, Susana; es mi obligación estar a tu lado. Ambas se confundieron en un fuerte abrazo y comenzaron a transitar juntas “el día más triste”, como define Susana aquel 3 de abril de 2002 cuando su hija María de los Ángeles Verón fue secuestrada a bordo de un Duna Rojo de la remisería Cinco Estrellas por una red de prostitución. “Ese día cuando me robaron mi hija me robaron la vida y desde entonces nada fue absolutamente igual. . . Para mí hace seis años que se acabaron los cumpleaños, las navidades, los casamientos, yo ya no festejo absolutamente nada. Mi único objetivo en la vida hoy apunta a encontrarla”, sostiene con voz firme Susana. -¿Es cierto, Soledad, que antes de comenzar a interpretar a Roxy en Vidas Robadas pediste conocer a Susana Trimarco - Sí, yo pedí eso, porque Susana en Vidas Robadas es nuestra musa inspiradora. Mi personaje está basado en su alma y se identifica plenamente con su perdida y su lucha. Interpretarla significa para mí una enorme responsabilidad porque debo transmitir el sufrimiento que está pasando.

“TODAVÍA ESPERO A MI MAMÁ”


Micaela (11) tenía apenas 3 años, cuando una mañana otoñal del 2003 una red de prostitución le arrebató a su madre: “La verdad es que tengo recuerdo muy confusos de ella, por eso siempre le pido a mi abuela, Susana, que me cuente cómo era ella. Lo que si no me olvido, es que ella me hacía los fideos amasados que tanto me gustan”. Hoy, aquella niña de mirada triste, es ya toda una señorita, y a pesar de su corta edad, asume con absoluta entereza el rol que le toca : “Es fuerte ser la hija de Marita Verón, porque todo el tiempo la gente pregunta sobre mi mamá, aunque al menos en el colegio esas ansias se calmaron, porque ya todos conocen mi historia. Aunque a decir verdad ya me acostumbré a vivir con su triste fama”. Para ella no fue nada fácil vivir estos años sin su mamá y a lo largo de estos 9 años de búsqueda infatigable, se convirtió en una testigo silenciosa del peregrinar de su abuela por prostíbulos y pasillos de tribunales: “Hoy, sin querer, soy una especialista en trata de blancas y no veo las horas de crecer para poder ayudar más a mi abuela en su lucha contra esos delincuentes. Ya me acostumbré a vivir con custodia. Desde que iba al jardín, me crié con policías a la vuelta, hoy ya no me resulta tan raro y la verdad es que ellos que me custodian desde hace años ya son como parte de la familia”. Habla con absoluta soltura sobre lo que le tocó vivir y no duda en prevenir a las chicas de su edad sobre cómo actúan las organizaciones delictivas que secuestraron a su mamá. Aunque ahora se la ve feliz, Micaela sostiene “Yo no voy a parar hasta encontrar a mi mamá, porque a pesar de todo lo que dijeron, lo último que voy a perder es la esperanza de volver abrazarla”.

martes, 8 de marzo de 2011

LOS MICROCRÉDITOS LES CAMBIARON LA VIDA

Más de 8.000 mujeres salieron de la indigencia gracias a los prestamos que recibieron de Pro Mujer, una entidad sin fines de lucro, creada con el objeto de ayudar a la mujer a empoderarse y mejorar su calidad de vida. Hoy el éxito de esa cultura solidaria está a la vista, no solo vencieron a la pobreza, sino que además lograron que el hombre las valore y respete más.
Por CARLOS QUIROGA
Fotos. CARLOS VILLAGRA


“Yo siempre tuve ganas de progresar, pero la falta de capital y la imposibilidad de acceder un crédito bancario porque carecía de garantes solventes y casas para hipotecar, tiraban por tierra cualquier emprendimiento que podía iniciar. Pero mis sueños se comenzar a concretar cuando accedí por primera vez a un micro crédito de Pro Mujer. Hoy tengo una sandwichería y estoy contemplando la posibilidad de poner una gomería. Acá lo único que nos pedían, es que tengamos ganas de trabajar y que seamos puntuales en el pago. No sólo mejore mi situación económica, sino que aprendí buenos hábitos”, sostiene Josefina Domínguez, en el centro focal Rigoberta Menchú del barrio San Alfonso, a 50 cuadras del centro salteño.
Josefina es una de las 8,588 mujeres argentinas que salieron de la indigencia gracias a los micro créditos que otorga Pro Mujer, una entidad sin fines de lucro, creada en 1990 en Bolivia con el objeto de ayudar a la mujer latinoamericana a empoderarse y mejorar su calidad de vida y la de sus familias. “El 99 % de nuestras socias, son mujeres, porque está comprobado que las mujeres invierten el 90 por ciento de su ingreso en sus familias, mientras que los hombres solo un 30 o 40 por ciento. Cuando las mujeres progresan y alcanzan el éxito, los beneficios en el hogar se ven de inmediato: la salud y alimentación de la familia mejora, y aumenta el ingreso y los ahorros en el hogar”, explica José Morales, director ejecutivo de la institución.
“El primer paso fue capacitar a las mujeres y a medida que iban avanzados, se veía sus progresos en sus familias e inclusive el hombre, que en muchos casos había tenido sometido a sus mujeres la comenzaba a respetar. Pero muchas veces la falta de recursos económicos frenaba el crecimiento que había conseguido y fue ahí cuando surgió la necesidad de ver como la financiábamos para que ellas también pudieran contribuir al hogar”, afirma Morales. Hoy después de aquel comienzo, Pro Mujer lleva otorgado $6.000.000 en créditos en Salta, Jujuy y Tucumán.