viernes, 1 de abril de 2011

UNA AYUDA INVALORABLE

“Muchas de esas chicas que recuperamos estuvieron con mi hija y fueron ellas las que nos dieron las pistas para seguir la búsqueda. Blanca Vides vio a Marita en la “whiskería” El Desafío en La Rioja. Fue a mediados de 2003 y, según nos contó ella, las ayudó para que se pudieran escapar con un camionero de Rosario y les dio una carta para mí. Pero la carta jamás llegó a destino porque la policía de La Rioja al detener el camión en el puesto caminero, las hizo bajar a todas porque estaban en ropa interior y sin documentos y finalmente las devolvió a los proxenetas. Blanca, por suerte, logró salvarse porque iba escondida bajo la cama de la cabina. Más tarde nos enteramos que M, la chica que traía la carta, terminó con un tiro en la cabeza y la tiraron en un dique en La Rioja. Y a mi hija la golpearon hasta dejarla mal muerta por buchona”. Desde que comenzó su lucha contra la trata de blancas, las amenazas jamás cesaron, pero Susana decidió enfrentarlas: “El dolor de madre por el secuestro de mi hija me hizo perder el miedo. Fue esa fuerza interior la que me llevó a meterme en los prostíbulos, sin tener presente los riesgos que corría si me descubrían. El día que fui a la embajada de Estados Unidos a notificarme del premio, me llegó un mensaje de texto intimidándome para que me detuviera, pero no voy a claudicar. Las amenazas son como callos, que a esta altura no hacen mella en mi lucha”, sostiene desafiante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario